En su cumpleaños, los usuarios del Centro de Integración María Isabel, CIMI, representaron los clásicos de Disney frente a toda su comunidad, que con orgullo y esperanza pudieron presenciar cómo sus hijos seguían los pasos aprendidos y demostraban que con amor y dedicación todo es posible.

El CIMI, que es administrado por la Corporación Municipal de Puente Alto, se creó en el año 2016, con la finalidad de ofrecer un espacio físico inclusivo y adecuado para personas mayores de 26 años en situación de discapacidad, que por normativa ministerial quedan fuera del sistema de educación formal, al reconocer como la edad máxima de permanencia en la Educación Especial Diferencial, los veintiséis años cumplidos durante el año lectivo correspondiente, quedando posteriormente al cuidado de sus familias, con la consecuente dificultad que esto conlleva para sus cuidadores.

Este escenario, es el que motivó al alcalde de Puente Alto, Germán Codina, a dar respuesta urgente a esta necesidad y concretar este proyecto como apoyo a las madres. “Este es un proyecto hermoso que me llena el corazón, un lugar que soñé para darle un espacio acogedor y digno a ustedes que reconocen y saben lo difícil que era estar en la casa y no tener una atención adecuada y profesional. Me siento feliz y orgulloso de que esté funcionando, de que haya pasado de ser sólo una infraestructura a tener vida, transformándose en un lugar para crecer todos los días”, expresó el edil.

En la actualidad, el centro cuenta con un equipo especializado conformado por: Fonoaudiólogo; Kinesiólogo; Terapeuta Ocupacional; Técnicos en Enfermería y Procedimientos de Apoyo en Rehabilitación; Asistentes de Cuidado Personal; Administrativo; Conductores y Auxiliar de Servicio encargado de la mantención y el correcto funcionamiento del centro de integración.